“Yo trabajaba en la Subgerencia de Derechos
Humanos del Banco Central. Había entrado al Banco el 1 de diciembre de 2014, con
un grupo que venía a investigar la documentación que había en el Banco de la época
de la dictadura. Algunos de nosotros ya había trabajado en la Comisión Nacional
de Valores, investigando también lo ocurrido con las entidades financieras
durante la dictadura. Nuestro objetivo era buscar infomación que pudiera ser
relevante para detectar delitos relativos a deuda externa o a delitos de lesa
humanidad. Porque sabemos que en el banco hay más información de la que usualmente
circula”, dice Santiago, uno de los
cesanteados del Banco Central que participa del acampe que desde el miércoles
17 de febrero despliega al Asociación Bancaria en el microcentro porteño.
Lagrieta
En estos días se habla de la grieta. Se habla mucho de la grieta. ¿Demasiado? Aunque quizá no sea suficiente. Por eso este espacio: para compartir ideas, reflexiones, miradas y perspectivas sobre este concepto que parece explicar algo o pretende explicar algo de este presente. Miremos de cerca la grieta: miremos con ojos diversos. Empieza la pesquisa.
martes, 23 de febrero de 2016
lunes, 1 de febrero de 2016
Día de ñoquis
Vamos en el subte A a Congreso. MS lleva su
cámara de fotos, yo el grabador.
En la Estación Loria sube un chico que
ofrece improvisar un rap con las palabras que nosotros, los pasajeros, le
demos. “Macri”, digo y el chico la toma: “pero dejame decir Mauricio, Macri no
rima con nada”, pide. Y claro: Macri no rima, no encaja, no tiene
musicalidad, no va con la poesía. Vamos entonces con la palabra Mauricio, y
otras palabras que la gente da: verde, blanco, censura.
El chico empieza a rapear… tiene ritmo,
ustedes lo imaginan, va buscando temas, palabras entre compases y silencios,
mientras se mueve por el pasillo del vagón, desde una puerta hacia otra. Sube
gente, baja gente en las estaciones. El chico no para, cuando se acerca
escucho: “Pareces revolucionario, Mauricio, pero tenela clara, para mí hay censura/poque
ahí vienen, porque se acercan los malditos caraduras/ que parecen una armadura/
aunque yo tengo mi propia dulzura, nada que ver con la economía, yo hago la mía,
ni con la blanca, ni con nada de esa pavada, que ustedes que yo ando en la blanca, para nada: yo ando en verde por el mundo verde…” y así el chico con su
paso y sus versos sincopados.
Con el AFSCA no, Mauricio
El 15 de diciembre - Manifestación en apoyo a la Ley de Medios y en defensa del AFSCA.
MS con su cámara, yo con mi grabador.
viernes, 8 de enero de 2016
Catarsis y expresiones
El 10 de diciembre, Pablo de Marinis, sociólogo investigador y profe de la UBA me escribió un mail que transcribo:
"buenasss...
¿sigue pendiente el tema "grieta"?
¿sigue pendiente el tema "grieta"?
Investigador principal del Conicet
Para hablar de la grieta, Miguel Angel Laborde, investigador principal del CONICET, historiza:
"Desde que surgió el Movimiento peronista, en
el año 45, el país se dividió entre peronistas y anti
peronistas. Peronistas y gorilas. Los peronistas de un lado y el resto del
otro.
Como un matrimonio discutidor
Faltaba poco para el 10 de diciembre y en el cumpleaños de una amiga encontré a una socióloga que quiso hablar de la grieta. Una mujer de unos 60 años, de palabras tranquilas y precisas. Le parece muy bueno intercambiar y pensar el tema de la grieta. Y charla amablemente.
Las fotos de grietas son de Marcela de Grande.
Las fotos de grietas son de Marcela de Grande.
Otras grietas
La Grieta
Me negué a pensar que tal cosa existía y
creía que era un invento de los medios, un nuevo concepto de moda del que de
repente todos hablan.
Creo ahora según comentarios, posteos y
demás de gente común que La Grieta existe, que más allá del descalabro
económico que nos deja este gobierno, esa grieta es el problema más grande que
nos queda. Porque esa grieta nos divide en dos, hace que una mitad de nosotros
espere que el nuevo gobierno fracase, convalida y felicita actitudes mezquinas
de nuestros gobernantes, y fundamentalmente no nos permite avanzar en lo que
creemos que podemos ser, y nunca llegamos.
La foto es de Marcela De Grande.
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